Julio Iglesias recibe la ovación del público grancanario 21 de Julio de 2016 Diario La Provincia

Julio Iglesias cumplió con su promesa este miércoles de hacer en Gran Canaria un gran concierto. Lo hizo ante más 6.000 asistentes en el segundo de los cuatro conciertos programados en España, tres de ellos en Canarias, de las que dijo „era una decisión natural venir a las islas”.

Su capacidad de convocatoria no defraudó. Ver a Julio Iglesias en estos momento o verlo hace cuarenta años transmite la misma sensación hacia los espectadores. Y esta no es otra que la de un profesional cuidadoso con su imagen, sus discos, sus palabras y su espectáculo, que sabe qué es lo que tiene que dar a sus fans para que salgan radiantes tras más de dos horas y cuarto cantando sobre el escenario. Eso fue los que pasó ayer en el escenario del Gran Canaria Arena, que registraba a la cifra récord de 6.800 personas, la mayor que hasta el momento ha asistido a este recinto para disfrutar de un concierto.

Iglesias se mostró en plena forma tanto física como mentalmente, a pesar  de que el pasado domingo se cumplieran 48 años de su carrera. El control que ejerce hacia su trabajo también incluye la preservación de su voz de forma muy disciplinada.

El artista universal interpretó cerca de 30 canciones en un show cuidado hasta el último milímetro y planteado con un crescendo progresivo en donde sus grandes éxitos aparecían intercalados con otros clásicos de la canción romántica, con un control de la escena y el espectáculo tremendo.

Tampoco se olvidó de su mítico „Hey!” con el que consiguió su primera gran ovación de la noche, y los clásicos „pío, pío”, que sonaron repetidamente durante el recital. Pero quizás el momento más emotivo de la noche llegó con Talita, una niña de nueve o diez años a la que Julio Iglesias mandó a llamar para cantarle „De niña a mujer”.

Acompañado en todo momento por el público grancanario, Iglesias destacó la riqueza de la música canaria e interpretó temas isleños como „Palmero sube a La Palma” o “Canarito”. „Era una decisión natural venir a las islas”, señaló el artista, quien ha recordado los lazos que unen a la música canaria con la sudamericana antes de lanzarse a cantar varios temas mexicanos.

Han tenido que pasar más de veinte años para disfrutar de un directo de Julio Iglesias en Gran Canaria, pero la espera ha merecido la pena para sus fieles, quienes no dejaron de piropear al artista en el segundo concierto de su gira por España.